Desde 1928, con el inicio de la medicina veterinaria en Honduras por parte de Salvador Moncada, la actividad pecuaria es uno de los sectores de mayor impacto en la economía nacional y en la actualidad solamente el rubro ganadero aporta el cinco por ciento al Producto Interno Bruto del país.
Unos 100 mil productores ganaderos en todo el país mantienen sus hatos libres de enfermedades, mediante la intervención de los médicos veterinarios, quienes aportan su conocimiento en apoyo a ese renglón de la economía nacional.
El presidente del Colegio de Médicos Veterinarios de Honduras, Juan Carlos Ordóñez, explicó que casi el 82 por ciento de los ganaderos del país son productores a baja escala, con ello se habla de unas cinco hectáreas para una cantidad de entre 5 y 10 animales.
“Eso es importante mencionarlo, porque no solo es un impacto económico, sino un impacto social importante en muchos temas, estamos aportando nuestro conocimiento como Colegio de Veterinarios a esta parte productiva social, hablamos de que el sector ganadero entre carne y leche representa casi el cinco por ciento del PIB agropecuario, es una cantidad bastante importante”, dijo Ordóñez.
Con la participación del gremio de veterinarios se ha logrado controlar el ingreso de muchos males al país, entre los que se destacan las enfermedades avícolas como la influenza, laringotraqueitis y Newcastle que están afectando fuertemente a otros países como México.
A través de los médicos veterinarios se ha contenido además la entrada al país de enfermedades como las vacas locas, y la fiebre aftosa, que según el presidente de los veterinarios hondureños, si llegaran a entrar sería un desastre económico.
La generación de alimentos como la leche y carnes de cerdo, aves y pescado son temas productivos pecuarios que también dependen mucho de la labor de los médicos veterinarios en diferentes aspectos, como los nutricionales, reproductivos, genéticos y sanitarios.
Juan Carlos Ordóñez mencionó como parte de la labor de su gremio que en los últimos tiempos es rara la persona que no tenga en su casa con sus hijos a una mascota, lo que significa que ese animal debe estar sano para que no le transmita parásitos a sus niños y a toda la familia, ese es el trabajo que ha venido realizando el médico veterinario.
En relación a toda esa gama de actividades, el presidente del CMVH expuso “cuando usted entra a un supermercado con su familia que va a compra huevos, carne, queso, todos los productos pecuarios, tiene que acordarse de que todo ese producto pasó por manos de un veterinario para poder certificar que llegara allí en condiciones inocuas”.
FOTO: Juan Carlos Ordóñez, presidente del Colegio de Veterinarios de Honduras.
Fuente: http://www.latribuna.hn
No hay comentarios aún.